lunes, 15 de noviembre de 2010

Yo no busco nada raro, sólo alguien que me extrañe aunque hayamos pasado todo un día juntos, alguien que se ponga nervioso al verme, que no se aburra de mis charlas aunque pasemos cinco horas en el teléfono, que se alegre de escucharme. Alguien que me acompañe siempre a casa y haga divertido el camino, por más largo que sea; Alguien a quien pueda besar por un simple impulso sin sentirme atrevida. No me importan los regalos, las cenas, ni las flores, mientras él demuestre admiración, me conformo con saber que conmigo es donde más le gustaría estar siempre. Y si estuvieras aquí, nada me gustaria más que vivir todo contigo. Y que conozcas todas y cada una de mis sonrisas, alguien que sólo por mí de todo, que elija quedarse conmigo aunque tenga otros planes, que sienta que antes de mí ninguna otra existió, que sus amigos se cansen de escuchar mi nombre, que escriba las cartas más bonitas del mundo entero aunque tenga la letra fea y sean de dos renglones. Que él piense en mí, mucho más de lo que lo acepta, que sienta que se cae el mundo si discutimos y me abrace tirando su orgullo a la mierda, alguien que me haga reír hasta llorar, y me haga reír cuando no puedo dejar de llorar, que me diga que todas esas canciones de amor le recuerdan a mí, aunque sea mentira, que me diga que estoy guapa, aunque no esté del todo despierta, que me diga que doy los mejores besos, aunque haya habido otra mejor, que me diga que tengo los ojos más bonitos, aunque sean iguales a todos los demás, que le encante mi pelo, aunque siempre esté enredado. Alguien que me haga sentir la chica más afortunada del universo, sólo por el hecho de tenerlo.



domingo, 14 de noviembre de 2010

Si la vida te putea, sonríe y que se joda.

Me gusta reír. Esa sensación de que todo va bien, que dura unas milésimas de segundo. Adoro cuando es totalmente sincera, cuando sientes que te ponen unas alas y que puedes llegar a volar en cualquier momento. Tus preocupaciones parecen alejarse a donde no llegan a existir. Pero, odio cuando no tienes ganas de sonreír y debes hacerlo. ¿Por qué? ¿Qué pasa si no lo haces? Aunque, ¿sabes?A veces una sonrisa puede cambiar tu vida, y ver tu sonrisa en frente del espejo puede ser una nueva motivación para olvidarte de tus problemas, para plantarle cara al mundo, para decir Sí, soy feliz, a pesar de todo. 'Una sonrisa puede cambiar el mundo, pero el mundo no puede cambiar tu sonrisa..' esa es la idea. Así que, vive de manera que ilumines, no solo tu rostro al sonreír, si no los de los que tú más quieres, que están a tu alrededor. Porque la vida no para de ponerte obstáculos, y caerás, volverás a caer, al igual que tu pequeña sonrisa caerá. Y poco a poco te hará más fuerte, ¿sabes? Hasta que consigas verdaderamente, ser feliz. Aprende a sonreír, aunque quieras llorar... 
Porque, si la vida te putea... SONRÍE, Y QUE SE JODA.